domingo, 19 de septiembre de 2010

DIFERENTE


Había conocido miles de miradas,
felices, desconcertadas, apresuradas.
Pero ninguna como la tuya.

Conocía manos curiosas y extravagantes,
pero no inigualables, como las tuyas.

Y si, había besado algunos labios,
pero te diré un secreto más:
Mejores que los tuyos, no hay.

Pero eso no es nada,
lo más diferente que conocí en ti
fue lo que llevas dentro,
un alma como la tuya no camina por cualquier acera.

Si supieras cuánto miedo me da
saber que NO me da miedo quererte,
ni mucho menos amarte.

Estoy dispuesta a regalarte felicidad sin límites,
besos sin caducar y mi libertad.

¿Qué pasa si grito al viento que estoy enamorada de tí?

Te quiero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario